Bueno, pues pasado el 2013, voy a hacer un pequeño balance de lo que ha sido este año para mi.
En general ha sido un buen año, quitando los achaques de salud de mi suegro, que de vez en cuando se pega y nos pega un sustillo, podría decirse que en el resto de aspectos el balance es positivo.
Tengo y mantengo mi trabajo, un trabajo que me gusta y me llena. Un trabajo que a veces me martiriza por la exigencia emocional que requiere, pero entra dentro del pack.
Además, en octubre empecé a colaborar en un proyecto precioso con una amiga, una amiga de esas que no son de siempre, pero que la vida se encarga de ponértela delante y que las cosas, simplemente fluyen.
Mi familia. La adoro. Me encanta la familia que hemos formado. Soy feliz en mi casa, cada vez soy más casera!. Me gusta la tranquilidad de mi hogar. Levantarnos un domingo, pasear, volver a comer a casa y tirarnos en la alfombra a jugar los tres.
Mi hija. Bueno, qué decir de mi pequeña Carlota. Echo un poco de menos esa bebé que un día tuve y que ahora es una niñita preciosa, habladora, independiente y espabilada. Pero si algo he de resaltar de ella, y creo que es lo que más me gusta, es que la percibo FELIZ. Y eso creo que es lo mejor que le puede pasar a una madre, ver felices a sus hijos. Mi hija es una niña rodeada del cariño y el amor de mucha gente. Es una niña respetada, mimada, escuchada y querida.
En enero comencé mi formación en Terapia de familias y fue todo un acierto y un lujazo compartir un sábado completo al mes con las profesoras y el grupo tan guay que formamos las alumnas.
También en enero mi hija pronunció por primera vez su nombre, (a su manera, Tatota.
En febrero todo estuvo bien porque hubo "normalidad".
En marzo nació mi pequeña sobrinita Zoe, un amor de bebé.
Además, en marzo nuestra pequeña se lanzó a andar solita.
En abril conocí Granada junto a mi marido y mi hija y me enamoré de esa ciudad.
En mayo mi marido me regaló una bici con sillita incorporada para que Carlota y yo disfrutáramos del aire libre.
En mayo se casó mi hermano y lo pasamos requeteguay en la boda!
En junio me enteré de que iba a ser tía de nuevo. En febrero tendremos con nosotros a Eva.
En julio comenzó el buenísimo tiempo y con él las mañanas y tardes de bici, playa y piscina con Carlota, un ser de agua que ama por encima de todo estar en remojo.
En agosto el papi de Carlota empezó las vacaciones y pudimos disfrutar los tres del tiempo libre juntitos.
Visitamos la Costa Brava y nos reencontramos con viejos amigos en un pueblecito de Barcelona. Nos juntamos 6 adultos y 5 niñas y disfrutamos de lo lindo.
Septiembre está marcado por la incorporación de Carlota en la escuela infantil. Fue un mes duro para todos. Un mes de cambios, de vuelta a la rutina...
En octubre viajamos a Londres, una ciudad que tenía muchas ganas de visitar.
Además, inicié mi participación enun proyecto con niños que me encanta.
En noviembre Carlota cumplió dos añitos de vida. Pasamos un día genial con toda nuestra familia.
Y diciembre pues ha sido un mes 100% familiar. Con visita a la familia de Madrid incluída. Un mes de parón, de necesario relax antes de comenzar la marcha de enero.
También este mes terminé la formación de Terapia de Familias. Muy satisfecha por lo aprendido y vivido.
Es cierto que algunos amigos se alejaron, y que dolió. Pero el dolor a veces enriquece y hace que se vean las cosas desde una perspectiva diferente.
También es verdad que algunas personas se acercaron, tanto que las he llegado a sentir muy próximas a mi.
Pero si de algo estoy realmente orgullosa de este 2013, es que empecé a trabajar a nivel personal y estoy comenzando a ser feliz por mi misma, es decir, que cada vez menos mi felicidad depende de los demás... Y eso es genial...
Os deseo a tod@s l@s que pasáis por aquí, un 2014 lleno de buenos momentos....